Merecido reconocimiento a un yerbatero de la zona. La distinción que anualmente acuerda el Ministerio de Asuntos Agrarios de nuestra Provincia, recayó en esta oportunidad en la persona del Sr. Demetrio Hreñuk, pionero en la actividad, fundador de una importante empresa dedicada a la producción, industrialización y comercialización de la Yerba Mate.
Los méritos que avalan la decisión de las autoridades concedentes pueden sintetizarse en un pensamiento muy breve: “Una vida dedicada al trabajo”.
Tal lo acontecido, según el relato de Don Demetrio quien hoy cuenta en su haber 74 años cumplidos, la mayor parte de ellos compartidos con su esposa y compañera, doña Catalina Fedorak, con quien fundó y llevó adelante una familia de 10 hijos, la mayoría de los cuales continúan vinculados a través de la empresa, que hoy administran y dirigen, aquellos a “quienes les dimos una educación cristiana basada en principios de austeridad que a su vez recibimos de nuestros mayores”, tal lo expresado por quién con modestia, sencillez y disimulado orgullo, exhibe el galardón recibido.
Todo se inicia allá por el año 1937 cuando don Demetrio obtiene autorización para instalar un secadero de yerba mate en el lote Nro 191, por entonces se canchaba a machete y la prenda a favor del Mercado Consignatario se entregaba en los depósitos de la estación, la mayor dificultad la constituían los malos caminos.
Otra etapa es la que comienza en 1942, con canchadora de conos lentados de madera y accionada por un caballo en malacate. Los años transcurren lentos y sin apuros hasta 1962 en que se moderniza al secadero y se integran al trabajo los hijos mayores que de esta forma comienzan a cooperar en la formación de la futura empresa. Tres años después se gestiona la marca “Rosamonte” comenzándose la molienda en 1966.
Más adelante en 1972, se constituye la sociedad en comandita por acciones cuya dirección la ejercen los hijos Ramón y Luis Angel empresa que sigue creciendo a base de trabajo organizado para transformarse en lo que hoy ostenta la firma Hreñuk S.A., merecido premio para quien dedicó su vida a la yerba mate.
