Cada 29 de septiembre se celebra en todo el mundo el Día Mundial del Corazón, una fecha instituida por la Federación Mundial del Corazón (World Heart Federation –WHF) para sensibilizar acerca de la importancia de llevar un estilo de vida saludable como herramienta de prevención para el desarrollo de las enfermedades cardiovasculares .
Acompañamos a la Fundación Cardiológica Argentina y nos sumamos a la fecha y, puntualmente en esta edición, a la campaña #MICORAZÓNTUCORAZÓN que impulsa la toma de conciencia sobre la salud del corazón y la importancia de tenerlo sano.
Cada año 17,5 millones de personas mueren en todo el mundo por enfermedades cardiovasculares, incluidas las enfermedades cardíacas y los infartos cerebrovasculares. Esta triste estadística representa la principal causa de muerte en el país y el mundo, y se estima que para 2030 aumente a 23 millones.
Por eso, en nuestro compromiso con la comunidad, nos sumamos a la iniciativa global para cuidar nuestros corazones y los de nuestros seres queridos. Revertir estas desalentadoras tendencias es una responsabilidad que todos debemos asumir por la salud mundial. En este marco, invitamos a la población a sumarse a hacer una promesa por un corazón sano bajo la consigna “¿Qué podemos hacer para cuidar nuestro corazón?”.
La Fundación Cardiológica Argentina invita a sus Miembros Protectores a unirse a este desafío a través de las redes sociales con el hashtag #MICORAZÓNTUCORAZÓN. Nuestro equipo ya lo hizo participando de la elaboración de un material audiovisual que busca sensibilizar y convocar a la comunidad a hacer verdaderos cambios en el estilo de vida por un corazón sano.
“Esta iniciativa convoca a todas las organizaciones amigas del mundo a multiplicar su cruzada con mensajes concretos para replicar en sus comunidades locales. Estamos convencidos que esto nos permite llegar de una manera distinta a la población para generar verdaderos cambios de hábitos en la sociedad”, aseguró el Dr. Jorge Tartaglione, presidente de la FCA.
“Ser más activo, no fumar y comer de manera más saludable es la clave del cambio. Esto que parece tan sencillo es lo que nos va a permitir lograr un mundo con más y mejores corazones; y poder hacerlo más allá de esta fecha tan importante es nuestra responsabilidad para la prevención en salud”, concluyó.
¿Qué propone la cruzada?
Hacer una promesa para cumplir este año que implique cuidar nuestro corazón, y el de nuestros seres queridos. ¿Cómo?
Ser más activo.
- Intentá realizar como mínimo 30 minutos de actividad física moderada 5 días a la semana, o al menos 75 minutos de actividad física moderada 5 días a la semana.
- Jugá, caminá, hacé las tareas del hogar, bailá. ¡todo cuenta!
- Usá las escaleras, caminá o andá en bicicleta en lugar de usar el auto.
- Hacé ejercicio con amigos y familiares. ¡Es una manera de estar más motivado y que sea más divertido!
No fumar.
- Es lo mejor que podés hacer para mejorar la salud de tu corazón.
- A los 2 años de dejar de fumar se reduce sustancialmente el riesgo de padecer una enfermedad coronaria.
- A los 15 años de dejar de fumar, el riesgo de enfermedades cardiovasculares vuelve a ser como el de una persona no fumadora.
- La exposición al “humo de segunda mano” también es una causa de enfermedad cardiovascular en los no fumadores.
- Al dejar de fumar no solo mejorarás tu salud sino también la de aquellos que están a tu alrededor.
Comer de manera más saludable.
- Reducí las bebidas y los jugos de fruta azucarados. En su lugar, elegí agua o jugos naturales.
- Sustituí los dulces por la fruta fresca como una alternativa saludable.
- Intentá incluir en tu dieta 5 porciones de frutas y verduras al día, tanto frescas como congeladas, enlatadas o deshidratadas.
- Mantené el consumo de bebidas alcohólicas dentro de los límites recomendados.
- Tratá de limitar los alimentos procesados y envasados que a menudo son altos en sal, azúcar y grasa.
- Prepará en casa comida saludable para llevar al colegio o al trabajo.
Además, es fundamental realizar una visita periódica al médico para efectuar los controles de rutina que permitan medir los niveles de colesterol y azúcar en sangre, controlar el peso e índice de masa corporal, y la presión arterial. Conocer el riesgo de enfermedad cardiovascular permite actuar a tiempo y planificar cómo mejorar de la salud del corazón.